lunes, 1 de diciembre de 2014

LA PROTESTA EN EL ESTADIO


Escribe Dianeth Pérez


La protesta de los mexicanos en los Países Bajos cumplió el cometido de enviarle un mensaje al presidente Enrique Peña Nieto: los mexicanos en el mundo estamos atentos a la situación del país, las explicaciones sobre Ayotzinapa no nos convencen y pensamos que carece de la honestidad y la capacidad para dirigir a México.

Agitar los pañuelos negros durante el himno nacional y los blancos durante el minuto 43, estaba planeado. El grito de “Justicia”, no. Esa fue una muestra espontánea del dolor, la indignación y la impotencia que sentimos los mexicanos que estamos por estos lares y que empeora con la distancia.

Logramos el apoyo de la prensa holandesa, que se solidarizó de inmediato con nuestro movimiento y nos deseó suerte, pues nos comentan que reaccionan incrédulos a las horribles noticias que llegan de México con regularidad.

En la televisión holandesa, a diferencia de la mexicana, los comentaristas hicieron mención de las acciones de protesta afuera del estadio, durante el himno nacional y en el minuto 43. Previo al partido estuvieron repitiendo nuestra invitación a los aficionados holandeses de sumarse a la protesta agitando pañuelos blancos.

La policía nos había advertido que no podríamos pasar ningún material utilizado en la protesta afuera del estadio, pero aun así salieron a relucir muchas hojas con los rostros de los estudiantes desaparecidos, mantas y pancartas. Los pañuelos no tenían motivo para quitarlos, y esperamos que mientras la situación política y social en México no cambie, esta acción persiga a la selección nacional por el mundo.

¿Por qué mezclar el futbol con la política? La selección nacional es una embajadora deportiva, un pedacito de México que viaja por el mundo atrayendo a las comunidades de mexicanos a los estadios. El futbol y las telenovelas son los anestésicos favoritos de muchos mexicanos para escapar de la realidad, y nada mejor que usar uno de esos medios para decirles que estamos pendientes de lo que pasa en México, que exigimos justicia y que como la mayoría de nuestros paisanos, estamos cansados de la impunidad y la corrupción.

Fueron pocos los holandeses que imitaron nuestra acción, y es comprensible. Ellos iban a ver futbol y no son sus problemas, pero no podemos estar más satisfechos con los resultados. Medios de todo el mundo dejaron constancia de lo que fue la primera incursión de la política en un partido de futbol en los Países Bajos.

Cabe destacar que hubo mexicanos que no tenían boleto para el partido y que solo fueron a apoyar la protesta que empezamos tres horas y media antes del silbatazo inicial. Otros más cooperaron con dinero o trabajo para hacer mantas, pañuelos y banderas.

La comunidad de mexicanos en Holanda está conformada por más de tres mil personas y la mayoría venimos por o con títulos universitarios, maestrías o doctorados. El futbol y la política sí se mezclan; el grito de “Justicia” se escuchó en todo el mundo.

Dianeth Pérez Arreola (México) es egresada del Máster en Comunicación Periodística de la Universidad Complutense de Madrid. Colabora en varios proyectos periodísticos y vive en los Países Bajos desde 2003.